Una de mis adquisiciones veraniegas han sido unos nuevos auriculares. En este caso me he decantado por una opción de gama alta, aunque apostando por una marca bastante desconocida en Europa.
V-MODA tiene cierto prestigio en EEUU donde lleva operando desde el año 2004. Sus productos son de alta calidad y cuidado diseño, algo que les valió para trabajar junto a Apple en el 2007 y lanzar los V-MODA Vibe Duo, unos auriculares de botón destinados al iPhone y iPod.
En este caso me he decanto por unos auriculares de orejera, los V-MODA Crossfade M-100. Este modelo destaca por su comodidad y alta calidad de sonido. Sinceramente, escuchar música con los Crossfade M-100 hace que no quieras volver a escuchar nada con otros auriculares.
La nitidez del sonido es muy clara, tanto para los graves como los agudos y en el grado medio mantiene una calidad a su vez sobresaliente. Los V-MODA Crossfade M-100 son muy apreciados por DJ’s y productores debido a ello.
Otro aspecto en el que destacan es en el diseño. Como ya he comentado, V-MODA cuida en extremo el diseño de sus auriculares, de hecho es realizado por diseñadores italianos en Milán.
Jugando con el diseño, los V-MODA Crossfade M-100 permiten intercambiar las placas metálicas laterales, de manera que se puedan personalizar los auriculares a gusto del consumidor. En su propia página tienen varios modelos de placas, por internet se pueden encontrar varias colecciones y de vez en cuando lanzan colecciones exclusivas.
En resumen, unos auriculares de 10. Los V-MODA Crossfade M-100 no son baratos, están por encima de las 200 libras, pero pude hacerme con ellos en una de las ofertas que Amazon ha estado lanzando este verano en distintos productos.
Actualización: después de casi año y medio utilizando los auriculares a diario durante mis horas de trabajo tuve un problema de sonido en uno de los paneles. A través de Twitter pude contactar con el servicio de atención al cliente 6 estrellas de V-MODA y acceder a la garantía.
Gracias a ellos pude gestionar, de manera gratuita, el envío de mis auriculares a su sede de California donde han sido reparados y reenviados de nuevo a Londres.
El único pero es que el envío de vuelta fue una mezcla entre UPS y el Royal Mail que hizo que me tocará ir a recogerlo a la oficina de correos ya que no me avisaron de cuando los iban a traer de vuelta.