Como paso previo a ir comentando todos los lugares que he visitado durante mi viaje a Japón voy a intentar recopilar algunos de los aspectos necesarios para preparar el viaje a Japón.
Documentación y visados
En principio, como ciudadanos españoles únicamente es necesario tener un pasaporte vigente. Durante el vuelo a Japón se nos entregarán un par de formularios donde indicar una dirección de contacto y las típicas preguntas sobre si somos unos tipos malos o no.
Una vez aterrizados se pasa por el control de fronteras y nos sellan el pasaporte con la fecha hasta la que podemos estar en el país como turistas, que son tres meses desde la fecha de entrada.
Y.. poco más.
Billete de avión
Los billetes de avión son el primer motivo para echarse atrás a la hora de viajar a Japón. Indudablemente, se trata de un viaje bastante largo y son caros. Pero, honestamente, si lo comparas con viajar a cualquier lugar de Europa o mejor, aún, un vuelo doméstico en España, tampoco hay tanta diferencia.
En todo caso, recomiendo, por experiencia propia y después de este viaje, viajar en algo mejor que la clase turista. Son muchas horas y algo de movilidad se agradece con el paso, interminable, del tiempo.
La siguiente duda es si hacerlo con escala o sin ella. Desde España ya se puede volar desde Madrid directamente a Tokio. Hay varias escalas bastante comunes: Helsinki o Estambul, el vuelo por el Ártico es más corto, según parece (no para los terraplanistas)
En todo caso, recomiendo evitar Air France y su escala en París con cambio de aeropuerto. Donde las cuatro horas de escala se acortan tras dos horas en un autobús en el caos circulatorio de la capital francesa.
Cambio de moneda y pagos
Mucho hay escrito sobre si en Japón aceptan tarjetas o no. Si hay que llevar el dinero cambiado o se puede sacar allí de los cajeros automáticos, etc.. e indudablemente si se va a preparar un viaje a Japón éste es un aspecto importante.
Por mi experiencia personal, llevé cambiado un mínimo (por si la tarjeta no funcionaba) y una vez allí utilicé mi tarjeta Revolut. La cual puedes obtener aquí si no la tienes ya con un referido donde te regalan 10 euros.
La tarjeta Revolut tiene un máximo de 200 euros (o equivalente) en cajero al mes. La comisión que te cobran es como máximo del 2% y dado el cambio favorable que hace es mucho más ventajoso utilizarla que llevar cientos de euros cambiados desde España.
Por lo demás es cierto que en muchos lugares no aceptan tarjeta, sobretodo pequeños restaurantes e incluso en algunos hostales.
La red de cajeros automáticos de 7eleven es perfecta para sacar efectivo con la Revolut.
Además, en Japón están muy extendidas las tarjetas monedero. En mi caso me moví con la Suica, que permite pagar en transportes (autobuses y metro) tiendas o entradas a atracciones turísticas, entre otros.
Transporte dentro de Japón
La opción lógica, si te vas a mover por el país es sacar el JR Pass, una especie de Interrail japonés para la empresa JR (la Renfe de allí) Cubre la mayoría de líneas, incluidas muchas de alta velocidad (el famoso shinkansen)
Además, las grandes ciudades tienen una red de cercanías de JR que te permite llegar a cualquier lugar cercano. En este caso es conveniente estudiar las diferentes rutas, ya que también hay otras compañías de tren y redes de metro que no se cubren con el JR Pass.
Incluso para moverse por las montañas es conveniente, aunque a algunos puntos concretos es necesario desplazarse en autobús.
En todo caso, la compra del JR Pass es un trámite que debe hacerse en España y se activa en las oficinas de JR al llegar a Japón, que es cuando empiezan a contar los días para los que se contrata.
Una vez activado, los trenes de cercanías se pueden utilizar tranquilamente, enseñando el JR Pass en las entradas habilitadas en cada estación.
Únicamente es necesario reservar los asientos para los trayectos en shinkansen y trenes de largo recorrido, incluidos los trenes que van a los principales aeropuertos de Tokio.
Para ello hay que acudir a una oficina de billetes e indicar que tren vamos a utilizar, como suelen ser tan precavidos es recomendable hacerlo dos o tres días antes de viajar en ese tren.
Sanidad, vacunas, seguros de viaje
Japón es un país con unos estándares higiénicos muy altos, superiores a Europa, el agua potable es muy buena y todos los alimentos cumplen rigurosas medidas sanitarias.
Como no está de más prevenir y Japón es uno de los países con uno de los sistema sanitarios más caros, a la altura de EEUU, a la hora de preparar el viaje a Japón es totalmente recomendable contratar un seguro de viajes.
Es más, debido al jet lag y la diferencia de la comida (olvídate del sushi y prueba el ramen, udon, curry, etc.. ) los problemas intestinales pueden surgir en cualquier momento.
En mi experiencia personal, no he tenido ningún problema, pero nunca se sabe. Ya me partí los dientes en Nueva York una vez y siempre pueden ocurrir accidentes.
A la hora de contratar el seguro de viaje, lo mejor es consultar distintas opciones y escoger uno que ofrezca una buena cantidad en la cobertura sanitaria.
Por otro lado y aunque no lo hice, la única vacuna recomendada si se van a visitar zonas rurales de Japón por un período prolongado de tiempo es la de la encefalitis asiática. En principio, si se va a ir solo a ciudades da un poco igual.
Eso sí, recomiendo comprar un spray repelente de insectos nada más llegar. Nombre en clave en japonés 虫除けスプレー o むしよけすぷれー, que se pronuncia Mushi yoke supurei. En cualquier farmacia puede adquirirse y suelen durar entre tres y ocho horas.
En todo caso, llevar un pequeño botiquín con ibuprofeno, paracetamol, etc.. no está de más. Además de añadir algún antibiótico tipo augmentine, además de algún antidiarréico y un buen antihistamínico por si te acribillan los mosquitos.
Alojamiento
Como ya he dicho, los estándares higiénicos en Japón son muy altos y eso se nota en los alojamientos.
Un simple hostal puede estar mucho más limpio que muchos hoteles en España y ofrecer mejores servicios.
En todo caso, el alojamiento es bastante caro y en determinadas ciudades, debido al tránsito de personas que tienen, mucho más. Con lo cual si se va a preparar el viaje a Japón conviene hacer las reservas lo más pronto posible.
Aunque debido al aumento de la oferta por los JJOO o a las alturas de la temporadas cuando se viaje se puede tener cierta flexibilidad.
Aún así, combinando estancias en ryokan (el hostal tradicional japonés) hostales, airbnb y hoteles occidentales se consigue cierto equilibrio donde la noche sale entre 50 y 100 euros para dos personas.
La experiencia en ryokan es recomendable en las zonas rurales, además de ser la más común. Se trata de habitaciones donde duermes un futón sobre un tatami.
En las grandes ciudades existen hoteles similares a los europeos, aunque con las habitaciones mucho más pequeñas y minimalistas.
Un aspecto importante en las estancias japonesas son los baños, ya que las habitaciones suelen tener una habitación para el inodoro (los famosos inodoros con chorros de agua) y otra para la ducha con bañera.
Compras
Japón es un país consumista por definición, en cualquier sitio te van a vender, prácticamente, cualquier cosa. Como occidental tampoco he encontrado grandes diferencias de precio con Europa.
Tokio tiene varias zonas de compras, tiendas que van desde los 100 yenes hasta grandes marcas de lujo con precios prohibitivos.
En todo caso y como extranjeros, presentando el pasaporte no nos cobrarán el IVA de allí, que es un 8%. Normalmente para que te apliquen ese descuento tienes que comprar por una cantidad mínima, por encima de los 5000 yenes.
La única condición es que te sellarán las bolsas y no pueden ser abiertas hasta que abandones el país. En todo caso, a mí nadie me abrió la maleta para comprobarlo y llevaba todos los tickets pegados en mi pasaporte.
Internet
La conexión a Internet, un punto importante a día de hoy. Aunque existen redes wi-fi gratuitas hasta en las cabinas, es conveniente llevar algo que no nos haga dependientes del lugar donde nos encontremos.
En Japón se pueden comprar tarjetas SIM o eSIM y utilizarlas con nuestros teléfonos móviles. Este tipo de tarjetas implican que nuestros móviles sean libres o sean compatibles con los protocolos utilizados.
Para mí, la solución más sencilla es usar un pocket wifi, básicamente es un router portátil que te ofrece conexión en cualquier lugar de Japón.
Su alquiler es muy sencillo, indicas que día vas a llegar a Japón y te lo envían a la oficina de correos del aeropuerto donde puedes recogerlo con tu pasaporte.
Para devolverlo basta con introducirlo en el sobre que también se incluye y depositarlo en un buzón antes de pasar el control de seguridad del aeropuerto. Y sí, hay uno justo antes de entrar por si ya ni te acordabas.
Otros aspectos a tener en cuenta
En mi caso, he viajado con una mochila, hasta los últimos días en Tokio, cuando ya compré una maleta para poder comprar cosas. Por eso tuve que buscar como limpiar la ropa sucia que iba acumulando.
Al ser un viaje largo, ya que dedicas un día para ir y otro para volver y quieres aprovechar al máximo, es normal utilizar los servicios de un coin laundry. Las lavanderías abundan en las grandes ciudades y tanto hoteles como hostales disponen de una habitación para lavar la ropa.
La diferencia en estos casos, además del precio es que las lavanderías suelen disponer de mejores secadoras que los hoteles y hostales.
Otra de las grandes preguntas a la hora de preparar un viaje a Japón es cuándo ir. Generalmente, las mejores épocas son la primavera y el otoño. En invierno es cuando se pueden contemplar las mejores vistas del monte Fuji.
Los veranos suelen ser muy calurosos y húmedos, además de ser la temporada de tifones. En las tres semanas que estuve en Japón pasaron dos tifones. Además este año el verano ha sido especialmente caluroso y largo.
Si se elige la primavera hay que tener en cuenta que suele coincidir con la Golden Week, la semana de vacaciones de los japoneses.
Además de todos estos aspectos, a la hora de preparar el viaje a Japón conviene calcular el tiempo y las zonas que se quieren visitar. En todo caso, si se van a visitar las ciudades principales, recomiendo mínimo cuatro o cinco días en Tokio, de tres a cuatro en Kyoto y Nara y otros dos o tres días en Osaka.
Si se quieren ampliar las zonas a visitar, con excursiones desde Tokio u Osaka, habrá que destinar más días para el viaje.