Crónicas de Españistán (XXIV) – Mortadelo, Filemón y una chica del montón

Mortadelo y Filemón han acompañado a muchas generaciones de españoles. La creación de Francisco Ibáñez (entre muchas otras) es uno de los máximos representantes de la cultura del tebeo.

El tebeo es la versión española del cómic o el manga, las historietas gráficas de toda la vida.

Surgido en la postguerra tuvo un gran éxito hasta los años 80, desde entonces se han ido haciendo recopilaciones, aunque Mortadelo y Filemón siguen teniendo historietas actualizadas al menos un par de veces al año.

Ese gran trabajo de Francisco Ibáñez, que además ha realizado él mismo en su mayor parte, es el que se pretende homenajear con el premio Princesa de Asturias.

Los premios, son la versión española de los Nobel, entregados a personas o entidades que tienen un renombre global y una vida dedicada al esfuerzo con el reconocimiento de la sociedad.

Francisco Ibáñez cumple todos esos puntos y merece que le entreguen el premio. Para ello se montó una plataforma a través de Internet y se ha conseguido que su candidatura sea aceptada.

Si queréis conocer algo más sobre Ibáñez os propongo ver este documental que emitieron hace poco en TVE.

Los pasos siguientes se resumen en esta entrada de Twitter:

Después de este homenaje a Francisco Ibáñez, llega el baño de realidad, una realidad que no dista mucho de sus historietas, lamentablemente.

Esta semana, Filomena (nada que ver con Filemón) ha azotado el país en forma de borrasca con fuertes nevadas.

Los partes metereológicos llevaban anunciando su virulencia desde el pasado domingo. Aún así, llego el jueves y se lio lo que no está escrito, sobretodo en Madrid.

Bueno, en Madrid y en otros muchos sitios, pero claro, los medios parece que solo han podido llegar a la calle de al lado y mostrar el centro del Universo conocido.

Pero la crítica no va por ahí, se dirige más bien, a la gestión de los medios y recursos públicos.

En esta ocasión han intervenido las administraciones públicas a todos los niveles: ayuntamientos, diputaciones, autonomías, el Estado..

Hay que reconocer, que horas después han empezado a actuar de manera correcta, pero como siempre, no se hicieron previsiones.

El resultado: carreteras colapsadas, hospitales aislados, el aeropuerto más grande del país cerrado, gente pasando horas y horas fuera de casa..

Simples acciones de sentido común habrían podido evitar muchas de estas situaciones, pero como pasa siempre.. esto es España.

Situaciones muy de Mortadelo y Filemón, algunas con soluciones a lo Pepe Gotera y Otilio, otras con final feliz, la mayoría de las veces, afortunadamente.

Pero si algo nos ha dejado clara toda la situación generada por el coronavirus es que tenemos lo que nos merecemos.