El Oukitel K6000 Pro es un claro representante de las marca chinas que están invadiendo el mercado con componentes bastante decentes y un precio ajustado.
En este caso, este terminal se puede conseguir por menos de 200€. Tal vez su aspecto más destacado sea la batería de 6000 mAh que garantiza la autonomía del Oukitel K6000 Pro a unas 15 horas.
Esa batería penaliza su peso, que es bastante elevado, pero bueno, ya que llevas un ladrillo, que funcione. La pantalla es también bastante grande, de 5.5 pulgadas. Se trata, como puede verse de un teléfono bastante solido y sobrio.
Los materiales son sencillos, plástico y metal, pero con su peso y tamaño le dan un aspecto bastante resistente. Por supuesto, también incluye lector de huellas.
Sobre la cámara, bueno, no es la mejor cámara del mundo, aunque cuenta con un sensor principal de 13 megapíxeles con flash dual LED está bastante lejos de obtener los mismos resultados que el OnePlus 2.
El resto de componentes siguen esa línea de sobriedad y ajuste, pero por el precio que tiene tampoco se puede pedir mucho más.
En cuanto al software, trae Android 6.0 y el fabricante garantiza que se actualizará correctamente a Android Marshmallow. Una de las ventajas es que trae pocas aplicaciones del fabricante, así que con las básicas de Google está cubierto y se evitan duplicidades.
El rendimiento es bastante decente para el día a día, un par de redes sociales, navegar, leer el correo y hacer fotografías. Cuando pasamos a grabar vídeo la cosa empieza a calentarse.. y acaba al rojo vivo si pretendemos ejecutar algún juego, por sencillo que sea.
Este terminal no es para mí, que sigo con mi OnePlus 2, pero sí que es un ejemplo de como al final se nota tanto precio como optimización. Con unas característica similares, que un año después permiten ofrecer un móvil de bajo coste, el resultado no es, ni por asomo, el mismo.