Para finalizar con la ruta por los teatros y musicales de Londres nada mejor que una visita al Shakespeare’s Globe, donde se representan obras de William Shakespeare durante, prácticamente todo el año.
El actual edificio del Shakespeare’s Globe es una recreación del Globe’s Theatre, un teatro que estuvo en funcionamiento entre los años 1599-1644. El edificio original sufrió un incendio en 1614, con lo cual, tuvo que ser reconstruido también.
Basándose en estas dos construcciones, el actor estadounidense Sam Wanamaker promovió la reconstrucción del edificio actual, finalizada en el año 1997.
Como reconocimiento a la labor de Wanamaker el teatro principal cuenta con una sala anexa llamada de Sam Wanamaker Playhouse.
Volviendo al Shakespeare’s Globe, se trata de un teatro descubierto, al estilo isabelino, lo cual para una ciudad como Londres y junto al Támesis no deja de ser un poco arriesgado, vamos que se pasa frío, si hay suerte y no llueve.
La obra que pude ver fue una adaptación de A Midsummer Night’s Dream, una de las comedias escritas por William Shakespeare. La directora artística de esta versión es Emma Rice y la compañía de teatro se compone tanto de jóvenes actores como de veteranos, una mezcla que da un resultado muy fresco y energético.
Aunque el primer acto se me hizo un poco largo, hay que destacar que el ritmo de la obra va de menos a más y las pinceladas de humor llegan en el momento exacto para evitar la desconexión del espectador.
Los actores actual de forma irreverente y exagerada en muchos puntos de la obra, dotándola de ese humor tan inglés que a veces cuesta un poco de entender (que se lo digan a la espectadora que se llevo un beso en la boca de una de las actrices)
El periódico The Guardian tiene una extensa galería relacionada con la representación, donde se puede ver a los actores en el backstage y los preparativos de la misma.
Resumiendo, un buen punto final para el recorrido teatral por la capital inglesa, seguramente me haya dejado muchas grandes obras por ver durante estos años, pero tampoco había ido mucho al teatro antes de venir a Londres.