Pixel 9a

Desde hace un mes tengo un Pixel 9a, el último teléfono móvil que he adquirido. La verdad es que es el tercer Pixel que tengo, después del Pixel 6a y el Pixel 3a. La migración y adaptación ha sido rápida y sencilla.

Lo compré justo después del apagón y tuve serias dudas entre adquirir un smartphone o un Nokia clásico con funcionalidades básicas. El problema es que hay ciertas aplicaciones que son necesarias y ya ni se pregunta si dispones de ellas o no, como WhatsApp.

Al final y gracias a una oferta en la que envíe mi Pixel 6a me salió a menos de la mitad de precio, así que me decanté por el nuevo modelo Pixel 9a.

Como en otras ocasiones, dos puntos destacables a la hora de seleccionar un smartphone: capacidad para hacer fotografías y batería. De nuevo Pixel 9a se mantiene a la altura.

Cómo lleva pasando en las últimas versiones a de los Pixel, la cámara fotográfica mantiene las mismas características que sus hermanos mayores. Y es que el Pixel 9a viene servido con un par de cámaras gran angular (48MP, f/1.7) + ultra gran angular (13MP, f/2.2) además de una cámara frontal (13MP, f/2.2)

He de decir, que las cámaras de la parte trasera ahora sobresalen mucho menos que en modelos anteriores, optimizando el diseño.

A nivel de batería dispone de una batería de 5.100 mAh con carga por cable e inalámbrica. Creo que es el primer modelo de Pixel que tengo con carga inalámbrica y sobre todo en el coche viene muy bien.

Por lo demás cargado de aplicaciones de Google (tal vez sea lo peor – mejor según tus gustos) que si bien, tiene una aplicación para las fotografías muy completa, también añade aplicaciones que no utilizo.

Diseño

Cómo ya he dicho, las cámaras traseras sobresalen cuanto apenas, ya que se ha eliminado la anterior barra que ocupada todo el ancho del móvil. Ahora parece una pegatina con unos cuantos milímetros de grosor.

Otro punto destacable del diseño es que las esquinas son más redondeadas, estilizando las formas del móvil.

Sus dimensiones son bastante comedidas (y más en tiempos de teléfonos cada vez más grandes) 15 centímetros y medio de alto y 7,3 centímetros de ancho. Convirtiéndolo en un un móvil muy manejable, incluso con una sola mano. A ello también ayuda que pese únicamente 186 gramos.

El Pixel 9a está construido en aluminio y plástico, con versiones de color negro, crema, rosa y lila. Y con la oferta que lo compré pude añadir una funda protectora por apenas 10 euros.

Pantalla, procesador y sonido

Con la llegada del buen tiempo y los días soleados me he llevado una grata sorpresa. Con el nuevo Pixel 9a no refleja tanto la pantalla en entornos muy iluminado, el brillo se ha mejorado considerablemente.

Por lo demás una buena pantalla, con una tasa de refresco de 120 Hz que baja, por defecto, a 60 Hz si queremos ejecutar videojuegos, aunque puede configurarse para obtener máximos de 120 Hz. Eso sí, y no sé si será por el clima, hará que el móvil se caliente rápidamente.

Y es que el procesador es el Tensor G4, el mismo que monta el Pixel 9 XL. Se trata del procesador más alto de la familia Tensor y obtiene un buen rendimiento en tareas de uso habitual. Otra cosa es cuando se le exige un poco más, mostrando sus carencias a nivel de rendimiento y añadiendo un calentamiento más que evidente.

Dónde sí he notado cierta mejora es en el apartado de sonido. El doble altavoz estéreo que posee arroja una muy buena calidad, aunque si lo ponemos al máximo volumen se nota una ligerísima distorsión. Por este motivo espero que me dure más que el Pixel 3a que tuve que jubilar al fallar el sonido.

Después de un mes

Resumiendo este mes, el cambio ha sido evidente, ya que veo mejoras a nivel de batería y sonido con respecto al modelo anterior. Sigo detectando los mismos problemas de calentamiento del terminal. Quiero pensar que son más debidos a las temperaturas del sur de España que al uso del móvil.

Sigo utilizándolo para lo mismo, siendo la tarea más demándate el uso del navegador Chrome. Aún así, reinicio cada par de días y si se calienta, dejarlo encima de la mesa un rato.

Por lo demás, sigo negándome a utilizar aplicaciones de redes sociales, de ahí que Chrome sea mi principal aplicación. Desde hace un tiempo estoy intentando configurar el flow para la gestión de imágenes, sobre todo las que me envían por WhatsApp. Por lo demás el uso de pequeñas aplicaciones para cosas habituales como leer feeds o el correo.

Tal vez algún día debería escribir una entrada sobre éso.

También he visto que existe un sistema totalmente alternativo a Google: Graphene OS, aunque me temo que prescindir de la aplicación de fotografía de Google y configurar el resto pueden suponer un consumo de tiempo considerable.

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